martes, 22 de diciembre de 2009

CERRANDO EL 2009.

Cuando uno ve hacia atrás y el camino ha sido un tanto atropellado y ahora todo es tan diferente, tan grato, entonces valió la pena y tienes más ganas de seguir. “No hay que tomarse las cosas tan en serio” me decía un amigo. Claro, lo sé, es sólo que amo lo que hago, a mi gente, lo que soy y me gusta cuidarlo, y a veces me parece insuficiente, quisiera poder hacer más, y la verdad es que no, no me tomo las cosas tan en serio, aunque parezca, he aprendido a no hacerlo, a distinguir entre el apego y el amor.

Puedo decir que 2009 ha sido el mejor año que he tenido hasta ahora, lo digo con toda alegría. Supongo que antes de los 10 años también tuve épocas excepcionales, sólo que los recuerdos son ambiguos. Tampoco quiero decir que los demás no fueron buenos años, hubo de todo, es solo que este año ha sido muy distinto y agradable, tanto que a veces me cuesta creerlo. 2009 para mí ha representado la oportunidad iniciar nuevos ciclos, de tomar decisiones, de priorizar, de disfrutar cada momento, de creer en mí.

Así, tengo muchísimo que agradecer:

· CORRETIZA se realizó con gran éxito y el trabajo continúa.
· Trabajo: Mucho y contenta con lo que hago y con quienes trabajo.
· Viajes realizados: Guadalajara, Guanajuato, Veracruz (Puerto, Xalapa, Coatepec, Nogales), Cuernavaca, Acapulco, Valle de Bravo, mucho DF, mucho Tlaxcala, Oaxaca, nuevos lugares de Puebla…
· Varios conciertos, teatro, cine, paseos, salidas, fiestas; disfrutando a los amigos.

LO MÁS IMPORTATE:

· Familia: Excelente. Los amo, nos amamos y disfrutamos cada momento que pasamos juntos.
· Naria: Un año más juntas (14 años ya). Estaré pa ti toda la vida.
· Amigos: Siempre conmigo, siempre incondicionales.


No escribo motivada por la nostalgia de ver irse un año tan grato como este, al final el tiempo es relativo y esta manera de medirlo, cerrarlo y celebrarlo es un rito social, sin embargo es un pretexto idóneo para reflexionar, para poner en balanza, para dejar atrás lo que no queremos (aunque siempre es momento, claro).
Me encantan mis vacaciones -ya eran necesarias-. Y faltan dos últimos viajes: yuju!

¡GRACIAS!

Para finalizar: me choca que esté de moda ser Grinch, que se encierren en sus casas y no nos arruinen las fiestas con sus comentarios de: yo soy Grinch (pero está en la posada o la cena) y odio la navidad y estas presiones sociales (qué hacen recibiendo regalos entonces!) jeje.

lunes, 14 de diciembre de 2009

Lo otro

Lo otro no existe: tal es la fe racional, la incurable creencia de la razón humana. Identidad = realidad, como si, a fin de cuentas, todo hubiera de ser, absoluta y necesariamente, uno y lo mismo. Pero lo otro no se deja eliminar; subsiste, persiste; es el hueso duro de roer en que la razón se deja los dientes. Abel Martín, con fe poética, no menos humana que la fe racional, creía en lo otro, en "La esencial Heterogeneidad del ser", como si dijéramos en la incurable otredad que padece lo uno.



ANTONIO MACHADO

domingo, 6 de diciembre de 2009

Digo que no puede decirse el amor.

Digo que no puede decirse el amor.
El amor se come como un pan,
se muerde como un labio,
se bebe como un manantial.

El amor se llora como a un muerto,
se goza como un disfraz.
El amor duele como un callo,
aturde como un panal,
y es sabroso como la uva de cera
y como la vida es mortal.

El amor no se dice con nada,
ni con palabras ni con callar.
Trata de decirlo el aire
y lo está ensayando el mar.
Pero el amante lo tiene prendido,
untado en la sangre lunar,
y el amor es igual que una brasa
y una espiga de sal.

La mano de un manco lo puede tocar,
la lengua de un mudo, los ojos de un ciego,
decir y mirar.
El amor no tiene remedio
y sólo quiere jugar.


JAIME SABINES

lunes, 30 de noviembre de 2009

RODARÁ.





Este fin de semana, los niños de la Casa de la Niñez Poblana asistieron como invitados al Festival Internacional Rodará. El contacto se hizo mediante Corretiza con Roberto Mendiola, organizador del evento; asistieron 50 niños el día sábado y 35 niños el día domingo (28 y 29 de noviembre respectivamente). Rodará proporcionó los pases de entrada, así como el camión que fue por los niños a la casa hogar (Federal Atlixco, Km. 4.5) y al finalizar el evento, los regresó a la misma dirección.

Por mi parte, quiero agradecer en especial a Roberto y Lucero por su amabilidad, disposición y preocupación porque todo saliera bien, se cumplió el objetivo: los niños se pasaron una tarde agradable.

Nos divertimos mucho (me incluyo). Los esperamos el día 7 diciembre en CORRETIZA 2009.

Lucía.

martes, 24 de noviembre de 2009

CORRETEADORES OFICIALES

Súmate a la lista de Correteadores oficiales. ¿Cómo? Así:
Escribe o llama a los siguientes contactos:


Karen Lorenzini
22.21.83.74.07
karenlorenzini@hotmail.com


David Legaria
22.21.56.93.91
corre_veydile@hotmail.com

Lucía Beristain
22.24.93.86.30.
luciaberistain@gmail.com

La labor de los Correteadores es juntar de 5 a 10 libros entre: sus amigos, familiares, compañeros de trabajo, y entregarlos a los organizadores. Los Corretedores estarán invitados al evento de entrega y, además, se les otorgará un reconocimiento por apoyar a esta noble causa.


Apúntate.



¡GRACIAS!

jueves, 19 de noviembre de 2009

DESCRIPCIÓN DE UN IDEALISTA

Los humanos nos excusamos tras nuestra supuesta naturaleza, nos atribuimos: inestabilidad, miedos, pereza, vicios, egoísmo; decimos que somos vengativos, corruptos, que no sabemos reconocer nuestros errores, que mentimos, que somos infieles, negativos, que necesitamos adrenalina y riesgos.

Por otro lado también arremetemos contra los delitos (menores o mayores), nos asombramos de la ineptitud y favoritismo de nuestros gobernantes, del egoísmo de los que nos rodean, vituperamos a los que nos mienten muchas veces a sabiendas de que nosotros mismos lo hacemos, reclamamos un mundo mejor, pedimos y pedimos, pero cuando hacemos algo: “soy humano, cometo errores”. ¿Entonces? ¿También deberíamos atribuir a nuestra naturaleza un carácter permisivo y falto de congruencia?

Por supuesto, así como hablamos de esa parte natural en la humanidad, también reconocemos una naturaleza noble y altruista, con la capacidad de conmovernos por ciertos sucesos, de ayudar a otros, de idealizar un mundo mejor donde no haya tantas desigualdades, con cabida para el amor y el desprendimiento material. Reconocemos que hay seres dignos de admiración, que para nada se excusan tras su “naturaleza” para justificar sus actos, que asumen la responsabilidad de los mismos y las consecuencias que éstos traen consigo, seres (humanos también) que han logrado cambiar el rumbo de sus vidas y de quienes los rodean con las mejores armas: ejemplo y constancia.

A estos seres los llamaría Idealistas, no a los que predican un mundo mejor y son sólo espectadores, pantalla, discurso o imagen -y que además pueden dormir tranquilos-; sino a los que realmente asumen la difícil tarea de serlo, porque es mucho más complicado ser congruente, ser fuerte, ser honesto, trabajador, reconocer los errores y corregirlos, cambiar de ser necesario, pensar bien antes de tomar decisiones que pudieran lastimar a otros, llevar a cuestas sólo lo que puede y hará bien y no más, exigir lo mismo que dan, tener la cara limpia para reclamar a quienes tengan la obligación de hacer ciertas cosas, que las haga bien; aportar lo que se sabe y se es.

No puedo decir que niego nuestra “naturaleza humana destructiva” (por llamarla de alguna manera), pero si además, y aunado a esa naturaleza, reconocemos una parte bienhechora y creemos o queremos un mejor contexto para nosotros y los que queremos, es necesario entonces, sumarse a estos Idealistas y saber que lo único que resta es luchar contra nuestra propia naturaleza en pro nuestro y de todos, sólo así cambia el mundo. Si nuestra naturaleza es tener estos dos lados y hay quienes han podido superarse a sí mismos, ¿por qué nosotros no?


Abril, 2008.
Lo sigo creyendo.

martes, 10 de noviembre de 2009

Preparándose para Corretiza 2009

Estas fotos son de Corretiza 2008, “Corretiza” es una campaña de índole social, impulsada por jóvenes sin fines políticos o privados, con la intención de generar acciones ciudadanas que tengan un verdadero impacto en el desarrollo humano de la población de su entorno, mediante el fomento de la lectura en lo grupos más desprotegidos, donde la educación sea el principal estandarte.
Se pretende, con esta campaña, iniciar un movimiento de concientización de la problemática social que representa la pobreza extrema en el país, aunado a la baja calidad educativa. El objetivo es llegar a niños de casas hogar otorgándoles libros infantiles -cuentos principalmete- y generar, a partir de ello, dinámicas didácticas y lúdicas que fomenten un desarrollo integral de dicha población, donde la lectura sea una manera vislumbrar un mundo distinto al que conocen, pues sólo la educación, el ver otros mundos posibles, representará una verdadera oportunidad de romper la cadena de la que son víctimas y después parte.
Corretiza pretende no sólo la entrega de libros un día específico, pues al ser un movimiento organizado por jóvenes, un objetivo derivado de la donación es que estos jóvenes se comprometan con las causas sociales, que sirva para mostrarles parte de la realidad que vive el país y por ello, después del evento de entrega, se realiza un convivencia, donde niños y asistentes se divierten juntos -ver fotografías-.
Al final, es el trabajo ciudadano, los movimientos gestados desde el interior de la sociedad -sin fines lucrativos o filantropía de revistas- los que realmente puede generar cambios significativos en nuestro país.
Ojalá puedan apoyarnos.
Gracias.

jueves, 22 de octubre de 2009

CULTURA Y ECONOMÍA

No hablaré de cultura como representaciones culturales artísticas, hablaré de cultura en su sentido mucho más literal: aquello que nos da identidad, que nos distingue de otros grupos sociales; lo que somos y representamos. La cultura es inherente, se aprende con el día a día. Nadie nos da un manual de cómo ser mexicanos, pero vas absorbiendo esta información del contexto. Que no vengan a decirme que alguien que nació y creció en el territorio nacional -bueno, la identidad fronteriza es otro asunto- no tiene rasgos o comparte características distintivas de “nuestra cultura”. En lo personal me choca ese nacionalismo barato que nos venden, el de ser mexicanos en las fiestas, por los símbolos, por los historia conveniente que han escrito… pero por otro lado, está el estereotipo de los que odian ser mexicanos, los que viven enojados y lo dicen hasta con orgullo “me iré de este país porque son una bola de corruptos, flojos, irresponsables…”, esos que critican sin bases reales y su discurso parece certero; como de periodistas mal informados y tendenciosos, grilleros. Ambos extremos son igual de detestables. Sí, hay muchas cosas por las cuales sentir indignación, por las cuales avergonzarnos, sentirnos mal. Es más, yo misma soy tajante cuando se trata de ser críticos, pero hay que informarse y no únicamete con Loret o La Torre o como se llame.

Esta semana ha sido y será decisiva para la economía del país. Todos están mostrando su indignación con las medidas que se aprobaron en la Cámara de Diputados, los aumentos al IVA, ISR, a las telecomunicaciones, a los depósitos en efectivo, reduciendo su margen de aplicación de 25,000 a sólo 15,000 pesos, entre otras. Los medios no paran de hablar de dichas disposiciones, pero sobre todo, de la toma de la tribuna a manos de algunos diputados.

“Cómo es posible que vengan a cobrarnos más impuestos ahora”, dice el empresario que los evade donando al Teletón o haciendo, a su nombre, las donaciones que hacemos en las cajas de los supermercado o en los cajeros automáticos y que después deduce. “Cómo van a someter a impuestos las medicinas” dicen los lamebotas de Slim, que ahora es un empresario de Primer Nivel. “¿Cómo vamos a pagar impuestos por alimentos procesados?” dicen las empresas que llenan de comida chatarra las tiendas y los supermercados y que provocan que la obesidad en México sea un grave problema de salud pública, colocándonos como los principales consumidores de refresco a nivel mundial, ¡ah!, porque quizá en San Juanito de la Cruz el Alto no haya servicios, pero hay Coca Cola o Pepsi o similiares.

Y también está el otro sector, está el comercio informal –con todas sus formas y mafias-, el narcotráfico y las actividades que llamamos “ilegales” –muchas tienen que serlo, forzosamente, claro-. Tenemos una evasión fiscal risible, de las más altas a nivel internacional. No pagamos impuestos, no queremos pagarlos, “¿para qué si se lo van a robar? Yo soy más cabrón y no pago”. Pensamiento que se repite en todos los estratos sociales y que refleja nuestra cultura: evadir responsabilidades. Arriba están los ejemplos, pero nos quejamos: "no es lo mismo, yo no gano tanto".

¿Qué queremos? ¿Endeudarnos nuevamente con países extranjeros para soportar la recesión que vivimos? A la larga –otra cosa cultural que nos cuesta mucho, el futuro siempre se ve lejano- ¿no pagaremos más de impuestos para poder cubrir los intereses que genere este endeudamiento? Lo que no funciona es el sistema de recaudación actual. Y, por si no se sabe, el país se acaba de endeudar con el Banco Mundial.

Nos quejamos del aumento de los impuestos, no es que esté a favor de ellos, ahora que me toca pagarlos, entiendo que es horrible el trámite burocrático y, lo más difícil es entender, porque creces creyendo que uno debe evadirlos o pagar lo menos posible, porque es “tu dinero”; cómo comprender que esa aportación que hacemos, que esa pequeña parte de nuestro sueldo, es para que podamos llamar a un policía a la hora que se requiera, para ir al médico cuando nos enfermemos, para transitar por las calles pavimentadas que no se pagan solas, para contar con servicios, para la educación pública, para pagarle a los que nos gobiernan y que administren esos recursos, para que se implementen políticas públicas que combatan la pobreza, la inseguridad… ¿Quién más va a pagar por todo esto si no somos todos? Los que ganan más deberían pagar más, claro, suena lógico, ¿no? Si alguien gana 100 pesos al mes, ¿por qué pensar que todo lo demás se le dará gratis?

Entonces, ¿qué falta? Falta -según yo-:

Eliminar a la clase política actual del país, sobre todo a los sindicatos, sus líderes… a Elba Esther Godillo, a los panistas, perredistas, priistas y todos los istas que haya, que representan una bola de mantenidos.

Educación, información, compromiso social. Esta es la más difícil de las medidas, pues sin ellas, no se pueden lograr las demás.

Un plan de recaudación mucho más efectivo y menos engorroso. Estrategias que reduzcan la evasión fiscal, que haga conciencia de que los impuestos son necesarios. Verán que si todos desembolsamos -al principio nos dolerá esta medida no inculcada- obviamente más personas estarán preocupadas y ocupadas en ver qué se hace con este dinero y no sólo lo utilizarán como discurso barato para ganar popularidad o adeptos.

Eliminar a la clase política actual del país.

Legalizar la droga, la prostitución, el aborto; regular el comercio informal, lo que generaría una fuente alta de ingresos para el fisco, suficientes para crear organismos que regulen y vigilen estas actividades. Hasta fuentes de empleos se generarían, tendríamos un boom de drogadictos que requerirían atención médica, psicológica…

No aumentar los impuestos, pero el impuesto a alimentos y medicinas no es mala idea, al final, ¿no son también fabricados por grandes empresas?, ¿los pobres comen gansitos y esas cosas? Quizá así se reduzca su venta y nos preocupemos por consumir otro tipo productos que no dañen nuestra salud y bienestar.

Eliminar a la clase política actual del país.

martes, 20 de octubre de 2009

La infancia en el mundo.

Estamos acostumbrados a las estadísticas, los números, los datos duros, este enfoque cuantitativo que nos ha vendido la modernidad, que nos permite medir, comprar, probar, respaldar. Números. No tengo nada contra este enfoque, al final, necesitamos un soporte numérico para validar. Por ejemplo, según datos de la UNESCO:

· 10,5 millones de niños aún mueren por año en todo el mundo;

· 29.000 niños menores de cinco años mueren por día, casi 4.000 niños simplemente porque carecen de condiciones de salubridad y agua segura;

· 12 millones de niños de todo el mundo se han convertido en huérfanos debido al SIDA;

· 146 millones de niños tienen hambre frecuentemente;

· 640 millones carecen de un refugio adecuado;

· 250 millones trabajan como mano de obra barata, 2 millones se prostituyen;

· El conflicto se ha cobrado las vidas de 2 millones de niños en los últimos diez años, dejando a millones heridos y discapacitados;

· 300.000 niños de todo el mundo se les obliga a portar armas; y

· 72 millones de niños aún no asisten a la escuela.


Qué hay detrás de todos los datos? De entrada, estas cifras tiene un margen de error alto, ya que muchos de estos datos son proporcionados por las propias autoridades de cada país -¿qué gobernante en turno le gusta quedar como inepto ante las demás naciones?- o de organismos que trabajan con fondos gubernamentales; aunado a que quizá la metodología utilizada también presente deficiencias en su levantamiento de datos. Luego, hablan de SIDA, de prostitución, de hambre, de guerra, de educación, de salubridad, refugio... las consecuencias de causas mucho más arraigadas. No basta con dar de comer, con proporcionar techo, con cambiar políticas públicas para aumentar la salud y la alimentación, porque éstas son derechos y no deberían ser negadas ni aplazadas. Tenemos problemas graves que generan toda esta crueldad hacie el grupo social más desprotegido: la deficiente educación, la desigualdad, la manipulación de la información, las luchas por el poder, los gobernantes que pelean por salir en foto, la pasividad de quienes lo saben y no hacen nada...

miércoles, 7 de octubre de 2009

CORRETIZA 2009


Se solicitan pies para correr.

Requisitos: amor por los niños y ganas de ayudar.

Súmate.

luciaberistain@gmail.com

sethnefer1@hotmail.com

Diciembre, 2009.

lunes, 5 de octubre de 2009

Cumpleaños y blogs


Hace más de un año que inicié este blog, escribí tres entradas, me fui tres meses y volví. Hoy, mientras estaba dando mi clase, sonó mi celular: "recordatorio, cumpleaños de M. y M., preparar regalos". Sonreí y volví a guardar el teléfono. Si bien la fecha de inicio de este blog no es esa (6 de octubre), el motivo sí fue, en parte, él; además, octubre siempre me trae sorpresas y -dicen- también tiene las lunas más bellas. Miré hacia atrás y fue divertido, sobre todo cuando no hay más que agradecimiento y cariño. Una coincidencia que dos personas a las que les tengo grande cariño cumplan años el mismo día. Ella formará parte de mi historia de vida; él me enseñó lo que es querer. Cada uno en su vida, como debe ser, como debemos hacer todos: a lo nuestro. Por eso, esta entrada está dedicada a mi amiga M. y a M. Espero tengan un feliz cumpleaños. Nena: lo mejor para ti, para tu bebé y para tu gente, diviértete mucho hoy. Niño: que la vida te sonría -o hazle cosquillas pues-, esta es la sorpresa de este año, y no ande emo, arme la fiesta.
Los llevaré siempre conmigo.

Y bueno, por este recordatorio me puse a pensar en los motivos por los que iniciamos blogs, ¿cuál fue el tuyo? ¿Qué historia hay tras él?


Saludos

jueves, 1 de octubre de 2009

Concierto de PLACEBO. Palacio de los Deportes.

Ayer fue el concierto de Placebo en el Palacio de los Deportes en el D.F., y estoy muy contenta, pero por otro lado, preocupada. Cuento. Esperaba que hubiera muchísima gente, que el estacionamiento estuviera saturado, que el montón de fanáticos empujaran, que al salir el estacionamiento fuera un caos. Ya saben, te preparas psicológicamente, sobre todo con ¡PLACEBO! Mas no, no fue así. De entrada se nos hizo tarde -mea culpa- y llegamos corriendo, justo a tiempo. Nos tocaba en la pista y realizamos el proceso: revisión, boleto, esas cosas. J.A. puedo pasar la cámara escondida en su pantalón -casi se le cae varias veces- , adentro varios igual tenían su cámara, supongo, hicieron lo mismo. Miré el lugar... eran las 9 p.m., ¿se las había hecho tarde? No había mucho tráfico. Y entonces entendí.
El teatro, semivacío; los bares, igual; los cafés y restaurantes, ni se diga. La crisis se deja ver. Esto tendrá que ser un tema para otra entrada.

Haciendo a un lado un rato esta preocupación por la crisis, volveré al tema del concierto. No duró mucho, aún así fue genial. Nunca los había visto en vivo. Físicamente Molko no se me hizo tan bajito -bueno, parado al lado Stefan pues cualquiera se ve chaparro- y el baterista está bien loco, me gustó. Tocaron: Battle for the sun, every you every me, Follow the cops back home, Med, Special needs, Special K, Song to say goodbye, Taste in men… No faltaron las chelas y los olores a marihuana, los hombres gritándole cosas a Molko y varios comentarios de los de junto. Genial.

Me la pasé bien chilo -como dirían en Tijuana- y debo darle las gracias a J.A. por haberme llevado, la neta, GRACIAS.
Saludos.

lunes, 28 de septiembre de 2009

¿Ideas o acciones?

Tenemos un ideal de cómo nos gustaría ser, qué cualidades poseer, habilidades a desarrollar, metas; y sabemos, de igual forma, qué requerimos para ello, por eso trabajamos, estudiamos, hacemos o deshacemos, en fin, lo necesario para llegar a cumplir esa idea. A veces, aunque tengamos ese referente, no hacemos mucho para alcanzarlo y únicamente hay planes y planes -que vemos como ciertos y realizables-. Luego, confundimos, pensamos que ese ideal es lo que somos en realidad y cuando nos descubrimos haciendo algo que no entra dentro de esa imagen, decimos "yo nunca habría sido capaz de algo así" "nunca lo había hecho" "yo soy de las personas que..." Justificar. ¿Somos una idea o somos nuestras acciones? Esto llega a sembrar un sentimiento de culpa, porque creemos que somos esa representación mental, una descripción -como de perfil de blog- , que así somos. Golpe bajo a la autoestima.

"No soy de las personas que se va dos días de fiesta sin importar nada". A veces pareciera que decimos estas cosas con ganas de que alguien venga a probarnos lo contrario. O cuando vemos un documental sobre la economía internacional y el proteccionismo de los mercados y decimos "yo no compro cosas chinas, porque dañan la economía del país"; pero pasar por el aparador y ver algo que te encantó y decir: "bueno, por una de éstas no pasa nada, no morirá nadie" y te vas a casa con tu producto chino esperando que nadie te vea y sepa que no cumpliste con lo que dices de ti , ni de tus hábitos de consumo. Mas tú lo sabes y te reprocharás por eso.

¿Han escuchado preceptos como: no importa lo que hagas mientras no dañes a alguien con tus acciones? Olvidamos lo más importante: no lastimarnos a nosotros. Y para no lastimarnos deberíamos saber qué somos -acciones- y qué queremos ser -ideales- y no confundir a Chana con Juana, porque no hay permisos especiales, no hay excepciones, eso es la verdad, lo malo que estamos haciendo es lo que somos capaces de hacer, ¿por qué asustarnos?, ¿por qué justificar que nunca lo habíamos hecho o nunca lo hubiéramos imaginado? Entonces aparece el doble discurso, la doble moral y con esa misma hipocresía juzgamos a otros.

miércoles, 23 de septiembre de 2009

¡Gracias Sr. Gobernador!

En la exposición temporal de Picasso y Luna, en el Complejo Cultural Universitario, pueden verse dos enormes lonas en el andador cultural con las siguientes leyendas:

  • Lona 1: Gracias Sr. Gobernador, por su apoyo a la difusión de la cultura.
  • Lona 2: Gracias Sr. Gobernador, por traer a Puebla colecciones de esta calidad.
No supe si reír o llorar. Me parece una burla... con el logo de la BUAP y del Complejo. ¿Era necesario gastar en esas dos lonas? Nos quejamos de que no hay recursos, hay campañas para que no reduzcan el presupuesto para las univesidades públicas. ¿Cuál es el discurso oculto? Todos lo sabemos. Sabemos, además, los arreglos políticos y los beneficios. ¿Para qué más circo? Los gobernantes, los funcionarios públicos, hoy, son artistas, parte de la farándula, de un espectáculo: "mira, yo tengo más adeptos", "a mi me ponen lonas dándome las gracias", "yo aparecí ayer en 20 periódicos""tengo novia actriz y gastamos un dineral en medios", "mi fiesta de cumpleaños fue la más grande, asistieron 200 figuras políticas". Derroche, ego, imagen, pagados con el dinero que bien podría ser utilizado para otros rubros. Sólo figura, no hay fondo.

De verdad que tenemos a los políticos que merecemos, ¿por qué les permitimos que se burlen de estas formas? y lo peor: en espacios universitarios, ¿qué podemos esperar de los futuros egresados?, ¿más títeres, más víctimas de nuestra falta de análisis, de nuestro bajo nivel de participación? Quizá parezca una nimiedad, quizá lo sea, pero estas nimiedades se repiten a escalas enormes, que representan millones de pesos que seguimos pagando. Estas pequeñeces -que a nadie indiganan, parece-, son la raíz de las grandes excentricidades que les permitimos a nuestros gobernantes. ¿Falta dinero? Sí, falta dinero en investigación, en educación de calidad, en cultura, en deporte. ¡Ah! no hay para eso pero sí para andar levantándose el cuello por cada cosa que se gestiona desde un gobierno, pagando millones a televisoras y medios por vender una idea. El señor anda limpiando su imagen, aunque ¿alguien es tan iluso como para creerle al Precioso? Si él hubiera pagado la exposición, démosle las gracias. ¿No es acaso nuesto dinero con el que se pagó?, ¿gracias sr. gobernador?, ¿los universitarios lo decimos?

Y las lona proliferan: aquí somos panista, aquí perredistas, esta facultad apoya a ...., en esta casa se vota por ... Es irrisorio como apelamos a la civilización por un lado, a la democracia y esas cosas de discursos bonitos y rebuscados, y por otro, seguimos marcando territorios, jugando a las guerritas.

martes, 22 de septiembre de 2009

Quiero llegar a vieja

Hay un gran miedo a la vejez, sobre todo en estas épocas donde la estética es un factor sumamente relevante. En televisión, por ejemplo, podemos ver a artistas como Maribel Guardia que, a sus 50 años, luce un atuendo tan diminuto que no deja nada a la imaginación. Tiene qué mostrar, nadie lo niega. Y así, tener 50 años es ser un adulto maduro, mientras que en la Edad Media llegar a esa edad hubiera representado un milagro.

Las compañías de cosmetología han encontrado, en este fenómeno, un nicho de mercado a explotar, y lo hacen –y caemos-. No hay mucho de qué asustarnos, entrar en el estándar de belleza siempre ha sido uno de los objetivos de las mujeres –también de los hombres, aunque no tan marcado como ahora-, por eso es absurdo vanagloriarnos de que en otras épocas era distinto, porque no es así. El modelo de belleza sí era diferente, es decir, no siempre estuvo de moda ser esqueléticas(os), o parecer jóvenes de 18, pero estaban de moda otras cosas: en la Edad Media y debido a las situaciones precarias de vida, una mujer delgada –como modelo actual- era grotesca, porque la delgadez extrema era asociada a la muerte por hambruna o muerte por enfermedades propias del contexto; las mujeres robustas eran el atractivo, pues quería decir que podrían sobrevivir a tales males y, por ende, cuidar a los hijos –las flacas comían arañas machacadas para poder subir de peso y las mujeres actuales dejan de comer para estar delgadas-. En la época de los tocados y los altos peinados, llenarse de polvo para estar blanqueadas –con lo que lograban taparse los poros, quemarse la piel, envejecerla- y pintarse los labios de rojo en forma de corazón, era considerado "de clase"... Podríamos seguir con más ejemplos, al fianl todo es cuestión de la cultura, de contexto, con la constante: no importa el precio a pagar, hay que entrar en la moda, en los estereotipos.


“Ser bello” es lo in. Hay una discriminación muy marcada a las personas con sobre peso, a los estéticamente distintos, a los que no están dentro de las tendencias que marca la moda –sea cual sea el grupo social al que se pertenezca- y a los viejos. Esta discriminación está ahí, sólo que la disfrazamos de manera elegante y como parte de nuestra cotidianeidad: “¡Mira su pantalón!” “¡Cómo pudo llegar a ese peso y no hacer nada!” “Seguro es una fresa” “Es un geek” “¡Qué viejo se ve!” “¡Come papitas y gorditas!”. Sí, lo hacemos y las generaciones pasadas también lo han hecho, sólo que en el presente somos “diplomáticos” "tolerantes" y no lo aceptamos. ¿Discriminación? ¿Nosotros, los civilizados? No, para nada, si por eso hacemos campañas contra la discriminación…


Por eso hoy nadie quiere llegar a viejo. Se dicen: "a los 33, como Jesús", "no quiero llegar ser un anciano (a) y volverme un (a) inútil y ser una carga", entre varias expresiones relacionadas. ¿A qué le tememos? ¿A vernos arrugados, con dientes postizos, con dolores propios de la edad? Pasa lo mismo que con el concepto de belleza, ser viejo ha cambiado su significado, sólo que el primer término sigue siendo un objetivo y el segundo dejó de serlo. Las personas de la tercera edad -me da risa esta expresión moderna para evitar la palabra VIEJOS- eran consideradas sabias, seres con conocimientos que podían orientar a los más jóvenes; a su cargo estaba el huehuetlatolli: palabra antigua, palabra sabía, donde los mayores plasmaban sus consejos con base en su experiencia. Para nosotros, los viejos son una molestia. En las empresas no los contratan; los asilos han duplicado su número de población; se han creado “las casas de los abuelos”. Se dice que “no están actualizados, que la tecnología y las nuevas formas de vida los sobre pasan, que no entienden los nuevos contextos…” Lamento decirlo: el promedio de vida es muy alto a comparación de otras épocas –con cáncer, pero alto- y la mayoría de nosotros viviremos hasta hacernos pasitas -la pirámide de población se invertirá y en unas décadas seremos más viejos que jóvenes-.


En lo personal, quiero vivir muchos años, todos los que sean posibles –decentemente si no es mucho pedir-. Me intriga saber qué cambiará, qué seguirá igual; si México algún día gana un mundial o si hay un viaje a la luna que pueda pagar –¡ya me vi!-, aunque lo más importante: vivir para estar cerca de los míos, para cuidar a los nietos y que me digan “no abuela, eso ya no se usa, mira, te enseño”. En otras palabras, para no dejar de aprender -hasta que el alzheimer me lo permita- ni de sorprenderme... -quizá esto último si me lo permita el alzheirmer jaja-

¡Saludos futuras pasitas!

lunes, 21 de septiembre de 2009

Pedazos

Cambios, muchos. Ansiedad por nuevos sucesos. Remembranza de gratos momentos. Aún no cesa la tromba. Su aparente calma me asusta más que su impetuosa furia. Esperar, sólo resta tener paciencia. La necesaria como para no rascar en el pasado lo que tanto añoramos en el presente. Sólo que algunas cosas no pueden ser ya posibles. Los recuerdos son los que se empeñan en mantener vivos a sentimientos que nos condenan. Recuerdos que con el tiempo no desean morir, o tal vez no las deje la necedad de un alma, ¡de esta condenada alma…! Mas ya vendrán tiempos mejores, porque siempre vienen. Fuera de este recinto de sucesos y emociones se escuchan voces augurando otros cambios.


Noviembre 2003.

jueves, 17 de septiembre de 2009

Días de eventos.

5 de septiembre: Aga boom.
CCU-Auditorio.

Las comparaciones, en este caso, no son ni malas ni buenas, pero sí inevitables. Slava's snowshow me gustó, la mezcla de efectos, música y actuación dan como resultado un muy buen espectáculo donde las sorpresas no paran. Aga boom no cuenta con tantos efectos especiales, por el contrario, su fuerte se centra en la actuación, los malabares, las acrobacias, la interacción y la comedia simple y sencilla. La utilización de un chorro de papel -espero que reciclen- y algunos sketches, generan una interacción directa con los espectadores, haciendo mucho más ameno el show. No puedo decir que uno me gustó más y otro menos, son conceptos similares, pero distintos en su presentación y objetivos. Slava's te llevaba por varias emociones; Aga boom te mata de risa.

Dimitri Bogatirev es el creador del concepto y su personaje es Aga, con su peculiar chongo en la cabeza, Iryna Ivanytska -su esposa- es Boom, Valery Slemzin es Dash y Mini boom es el hijo de la pareja de protagonistas. La foto de esta entrada es de Boom, en lo personal, el personaje más expresivo y de más peso en el show. El tiempo se va volando, uno se queda con ganas de más. El día que asistí no recuerdo a ver visto a la contosionista -sábado 5 a las cinco-, ¿alguien la vio en el alguna de las 3 funciones siguientes? Si alguien tiene oportunidad de verlo, no se lo pierda, se pasará un rato jugando como niño y con niños.

9 de septiembre: concierto de gaitas Tierra Megia.

Ese día, en lugar de ver el partido México contra Honduras - cuando Jovanhy no hizo la beliseñal y se desató la polémica de si andaban o no, ¡una noticia fuertísima!- , decidí perderme tan magno evento, para asistir a un concierto de gaitas celtas en la Ibero por el grupo Terra Megia. Sé bien poco de gaitas- casi nada en realidad- y sinceramente pensé que iría a un concierto de tintes académicos y que todos estaríamos en pose de seudo intelectuales diciendo: "oh, sí, la interpretación de Muñeira de Lugo me pareció la mejor de todas piezas" "La música celta de la época medieval era condierada...". Mas no fue así. El concierto fue dinámico, con invitados, baile y explicaciones entre cada interpretación sobre el estilo, influencias e importacia de tal instrumento en diversas culturas. Lo malo del evento fue el lugar, pues se realizó en el gimnasio de la universidad, lo que no favoreció tanto el sonido y además, al ser un escenario adaptado, hubieron por ahí varios errores y problemas de coordinación por los espacios.

El domingo, en el el Andador Cultural del CCU, estará presentándose esta orquesta de gaitas a las 3 p.m., si pueden asistir, vayan, es entrada libre. Parece ser que en noviembre se presentarán en el teatro, de este mismo recinto, para celebrar los nueve años que llevan ya como Terra Megia, vale la pena, pues tienen unas muy buenas propuestas, entre ellas, unas adaptaciones de rock -bajo, guitarra, batería- con gaita: interesante realemente.

Recomendados.

jueves, 10 de septiembre de 2009

Verdades universales

No hay maneras de asimilar lo aprendido, sólo una: prueba-error. Ayer escuché esto en una reunión: "los animales no pasan dos veces por el mismo lugar por el que han caído o se han lastimado, sólo los humanos” –frase explotada hasta el cansancio por los libros de superación personal-. Y sí, es cierto, la frase tiene razón, los animales no vuelven a pasar por ahí, pero – y aunque sé que esto quizá desate una polémica absurda-, el ser humano no es un animal –que se comporte en ocasiones como tal, es mera elección-. No sé qué obsesión tenemos con estas frases: “somos animales pensantes”; “es instintivo, es nuestra naturaleza animal”; “a veces no puedes controlarlo, es el animal el que actúa”, etc., etc. Entonces, ¿para qué usamos el término ser humano? Digamos mejor: El animal pensante, el chimpancé iluminado ese… Los animales no tienen un cerebro como el nuestro, al menos yo no he visto a ninguno que ande construyendo ciudades, armando computadoras, escribiendo un libro. Sí, entiendo que hay tipos de inteligencia y que existe algo mucho más básico que nuestro pensamiento lógico, heredado de nuestros antepasados en la cadena evolutiva, misma que ha tomado miles de años en gestarse, pero hemos cambiado, nos hemos convertido en otra cosa, en otros seres distintos. No somos animales, somos seres humanos; una u otra cosa, no las dos. Ahora, ser humano no implica, como ya se dijo, que únicamente tengamos una parte racional, pues nuestro cerebro tiene divisiones que han permito, que la parte instintiva que justificamos, conviva y funcione a la par de la lógica. ¿Por qué pasamos por el mismo lugar dos veces? Porque no somos animales. Imagínense que el primer hombre que usó el fuego hubiera dicho: ¡ah cabrón!, esto quema. O que uno, después de haberse enamorado perdidamente de alguien y haber sido herido – ¿de qué otra manera sabríamos qué significa el amor, el duelo y lo que es tener el corazón roto?- hubiera dicho: no, pues está difícil esto de enamorarse, ya no voy andar haciendo eso. Pareciera que en nuestra naturaleza –humana, la de pasar por el mimos sitio- está también nuestra condena, ¿no? Y sigue escuchándose fatalista. Al final, uno pasa todas las veces que sea necesario -hasta que aprendamos-, y que nos dé la gana, pasar por el mismo sitio, aunque sepamos, de antemano, que eso nos provocará algún “sufrimiento” posterior, supongo que al menos, algunos, ya no pasarán de la misma forma por el mismo lugar.

Y mi argumento es: no me gustan las frases con verdades universales, esas que no puedes refutar, frases que contradicen términos que creamos porque tienen una función. La mayor parte del tiempo uno prefiere dar el avión, pues terminaremos siendo tachados de herejes por blasfemar contra verdades establecidas por consenso social. La verdad es más simple: nos gusta tener frases de respaldo, que no puedan ser cuestionadas, que den punto final a un tema, como por ejemplo: “no hablemos del pasado, el hubiera no existe” ¿Cómo que no existe? Que uno no pueda regresar en su maquinita del tiempo y cambiar esa decisión o esa acción, pues sí, no se puede. Pero el hubiera está, lo usamos, lo inventamos y ya.

Hablar del pasado cuesta, sobre todo cuando aún nos duele, y es por eso que si metemos esta dichosa frase, entonces ya nada tiene sentido, porque estamos negando y dando por terminada una plática aunque aún haya cosas que decir o aclarar. Hay que cerrar ciclos, lo entiendo, pero hay que cerrarlos bien, sin nada pendiente, nada que arrastrar. Por eso creo que en algunas ocasiones el hubiera nos enseña, permite que identifiquemos el punto exacto donde dimos el volantazo, el dónde, exactamente, por andar papaloteando, nos dimos un madrazo por tropezar con una piedra o también, nos muestra en qué hemos cambiado: “Si yo hubiera quitado el miedo y hecho lo que quería…”. El problema no es el “hubiera”, el problema es lo que le sigue. Al mirar hacia atrás ves como tus decisiones te han dejado aquí, si estuviste consciente de esas decisiones, supongo que la segunda parte de la frase sería algo como: “si yo me hubiera quedado ahí –por algo no lo hice-, quizá no estaría tan feliz ahora”. Y por último, otra función del hubiera es que nos ayuda a saber que algo no está bien, que seguimos añorando o deseando que algunas cosas nos ocurran nuevamente o que aún no cerramos los asuntos pendientes. Depende de cómo lo usemos y para qué.

Ni qué hacer, cómo diría Montt "si vives mirando hacia atrás, lo que termina con tortícolis no es tu cuello, sino tu corazón". Ojalá que las Ardillas lean esto, porque desde ayer, como esos espejismo nostálginos, nos da por ver hacia trás cuando hay mucho camino por echar a perder. Por eso, cuando salgan, no olviden llevar su kid frases con verdades universales, son buenas para ya no hablar más del tema.

Saludos.

miércoles, 9 de septiembre de 2009

¡FELIZ CUMPLEAÑOS NA!


Hoy, hace unos veintipocos años, nació una mujer que para mí es un parte aguas: mi vida se divide en un antes y en un después de ella. Amiga, hermana de lazos mayores a los de la sangre, compañera de viaje… Enumerar sus cualidades, y contarles la vida a su lado me tomaría muchas entradas. Atesoro cada uno de los momentos que hemos pasado juntas, buenos, malos, ni malos ni buenos; raros, mucho más raros: todos. ¿Qué más puedo decir? Sabes –y sé que además lo sientes- el enorme cariño que te tengo, lo que representas; que la distancia no es nada para nosotras, que el tiempo, desde hace mucho, es relativo -alguien creo que ya lo había dicho-: estoy contigo siempre.

Gracias, bruja mía, por haberme dado brebajes para curar mi alma y quedar prendada de ti.
JE T’AIME!

PD. Foto del año pasado. Este año nos vamos de vagas!

martes, 25 de agosto de 2009

Mi vida con la ola.

Octavio Paz te toca suavemente, te va llevando, letra a letra, deleitándote con una grata descripción de las emociones humanas más sublimes. Te envuelve, te conmueves, te pones cómodo. De pronto: el primer golpe, el segundo, todos; deberías parar de leer pero estás atrapado. Sí, es conocido, te parece que así es, suena a verdad; una sin tapujos, sin adornos, fría. Sucede. Te dejas llevar y de pronto ya no hay salida y entonces te observas harto, distinto a eso que eras en un inicio y tus acciones te parecen desconocidas, absurdas, malvadas... "Mi vida con la ola".

El sábado 22 tuve la oportunidad de ver una adaptación de este cuento a manos de dos compañías de teatro: La Mojarra Enmascarada y Febrero 10 Teatro, en Xalapa (Teatro La Caja). El cuento me gusta -aunque Paz no sea de mi agrado-, sin embargo, debo confesar que íbamos sin muchas expectativas -Elise, quien se dedica al teatro en París desde hace muchos años, Alessandro que trabaja en guiones junto con Elise, Rémi que es músico, Jesús, Alejandra y yo, más aficionados que expertos-. La duda aumentó al ver el lugar: completamente vacío por ser sábado, ni un alma en los alredodores de la universidad. Los asistentes éramos únicamente nosotros y quizá unos amigos y familiares de los actores. El teatro pequeño, todo parecía tan surreal. Pero así pasa "...como el golpe de la ola de la sorpresa cuando la sorpresa nos golpea en pleno pecho..."
Lo que vimos nos dejó un grato sabor de boca. Combinaron muchas artes de manera sencilla y muy bien pensada, haciendo con poco, mucho. Luces, títeres, saxofón, multimedia -proyecciones de imágenes, historias realizadas en flash-. Por ahí hubo un par de errores técnicos, entre otros detalles, pero el resultado final no fue opacado. Nosotros, que ocupamos casi todo una fila -el lugar de verdad pequeño-, aplaudimos el esfuerzo, la creatividad y las ganas de hacer buen teatro, con obras que te hacen pensar y ver que los tiempo imperfectos nos llevan a vivir sobre olas: guíados por la marea.

Recomendado.
Saludos.


P.D. Las fotos me las robé de un periódico digital local. Y el músico... de actor es muy buen músico.
"No es deseo de hermosura; son ánsias de completud..."

lunes, 10 de agosto de 2009

Las promesas.

Hace tiempo pensaba que los temas me perseguían, pero lo cierto es que tengo fascinación por determinados temas y es mi inconsciente el que hace que los enfoque en mi en torno. Ahora el tema que me persigue es el de las promesas, un verdadero terreno minado.

No sé si haya tipos de promesas, como sea, son compromisos que nosotros aseguramos cumplir y que, generalmente, tienen que ver con realizar o no realizar determinadas acciones. Hoy leía el blog de Leila Macor, y al final de su más reciente entrada decía algo así: “porque desde el momento en que vivimos en hacinamiento, las relaciones humanas son el constante, y muchas veces frustrado, esfuerzo de molestarnos mutuamente lo menos posible.” Supongo que en ese no molestarnos también está ese otro frustrado intento por no herirnos entre nosotros y por eso prometemos, para poder controlarlo de alguna forma. Mecanismo de supervivencia, de protección.

Como garantía de nuestras promesas están nuestro honor -no tengo nada que ofrecer, excepto mi palabra-, nuestras creencias – lo prometo en nombre de mi dios- y hasta nuestros seres queridos –lo prometo en nombre de mi hijo/madre/mío-. Todo para darle valía a nuestra sentencia. En la vida cotidiana cumplir una promesa otorga al cumplidor reconocimiento y orgullo: él/ella si cumple su palabra.

Socialmente entiendo el valor de las promesas: nos regimos por normas de conducta que permiten una sana convivencia unos con otros, reglas de comportamiento donde se premian ciertas acciones y se castigan otras para estar lo más a salvo posible. De cierto modo este modelo funciona, pero a veces comprometemos, con las promesas, cosas que no se deberían hacerse como voto como: el amor, la entrega, la confianza, la fidelidad, pues éstas se dan o no. Y cuando ya han sido pronunciadas –quizá llevados por el momento- ¿debemos cumplirlas aunque la situación sea distinta? ¿Si ya no queremos consumarlas? ¿Qué pasa cuando esas promesas nos atan? ¿Y si no las cumplimos?
Hemos aprendido estas normas desde pequeños –prueba y error-, crecemos y nos parece natural tachar de incumplido(a) a la persona que no lleva a termino su promesa, y los que “fallan” a esta palabra cargan con ello con cierta culpa. Y con ese aprendizaje de que el mundo funciona así, también hemos aprendido a padecer el no cumplimiento de una promesa.

Y bueno, si confiamos en una persona, ¿para qué prometer? Y si esta persona no puede o no quiere ya cumplir esa promesa, ¿debemos guardar resentimiento por ello? ¿Debemos sentirnos obligados a cumplirla? Si hoy estás convencido de algo, pero mañana cambia la situación, ¿por qué atarnos a esas palabras? A veces se requiere mucho más valor para romper una promesa que para hacerla. Claro, no digo que hay que andar pronunciando promesas cual bolo en bautizo –hay que ser respetuosos con las palabras-, sólo debemos tomar en cuenta que podrían o no cumplirse y que así esto del fútbol, pues en realidad hay situaciones que no podemos controlar. Y sin embargo, y pese a todo lo dicho, me gusta creer en las promesas pronunciadas –asumo con ello la posibilidad de que algo cambie-, por ahora, soy feliz creyendo esas palabras, pues no es la promesa quién me da la certeza, sino los actos que son congruentes con lo que se dice y que me han dicho mucho más de ti y de mí que todo lo que pudiéramos prometernos.

Gracias.

Saludos.

lunes, 3 de agosto de 2009

La Tequilera.

Borrachita de tequila
llevo siempre al alma mia
Para ver a si se mejora
de esta cruel melancolía.

¡Ayyyy, por este querer
pos qué le he de a hacer!
Si el destino me lo dio
para siempre padecer.

Como buena mexicana
sufriré el dolor tranquila
Al fin ya al acabo mañana
tendré un trago de tequila

¡Ayyyy, por este querer
pos qué le he de a hacer!
Aunque me haigas traicionado
no lo puedo aborecer

Me llaman la tequilera
como si fuera de pila
Porque a mi me bautizaron
con un trago de tequila

¡Ayyyy, ya me voy mejor
pos qué guardo aqui!
Disque por la borrachera
disque todo lo perdí.

Museo del tequila, abril 2009.
Saludos.

miércoles, 8 de julio de 2009

El sombrero rojo: se busca.

Me gusta el rojo. Es de mis colores favoritos. La primera vez que me pinté el cabello fue de rojo intenso, cómo le decían mmm... borgoña o algo así. Duró poco, se perdió rápido. Otra vez me hice luces rojas, pero se pusieron rosa mexicano. Es un color difícil de traer en el cabello, pero no en la cabeza, por eso quiero un sombrero rojo. Me puse a buscar imágenes de éstos y me di cuenta que puede tener distintas connotaciones, así que aquí les dejo algunos. Quiero algo más tranquilo -como el de al lado-, quizá con la franja negra, para poder ponérmelo con un vestido negro ajustado o algo así. Además, ya tengo dos pares de zapatos que le van muy bien -oh vanidad!-



¿Ya ven? El modelo importa mucho. Cuando lo tenga, me uniré a la sociedad de las mujeres de sombrero rojo como ella:



jajajaja. Saludos.

viernes, 3 de julio de 2009

Pedazos (más)

Desperté de un ensueño. Abrí lenta y pesadamente los ojos como quien se resiste a mirar lo que hay dentro de su tan grata irrealidad. Un mundo que se mueve, cambiante, irregular. Donde hay seres que piensan, sienten y viven. Con su pedazo de tierra, de aire, de espacio. Aquí donde lo posible se encuentra con sus limitaciones: lo imposible. Aquí donde hay un pasado pues la línea de la vida corre con “sentido”. El orden, aquí, es que cada cosa ocupe el lugar que le corresponde. Donde la locura se paga por osar soñar demasiado. Donde se condena sin ser juzgados y donde se mata sin haber vivido. Pero aquí también hay realidades hermosas. Hay algo invisible que llena de misterio esta singular realidad. Dentro de nosotros lo sentimos y da razón a los actos. Eso que Dios sopló para dar vida a Adán…



Noviembre 2002